La masa madre es un ingrediente clave en la elaboración de panes y otros productos de repostería. Conocida por su sabor único y su capacidad para fermentar la masa de manera natural, la masa madre casera es altamente valorada por panaderos y amantes de la cocina. En esta nota, te mostraremos una receta paso a paso para hacer tu propia masa madre en casa.
Ingredientes:
- 100 g de harina de trigo integral
- 100 ml de agua sin cloro
Paso 1: Día 1
- En un recipiente de vidrio o cerámica, mezcla la harina de trigo integral y el agua sin cloro hasta obtener una masa pegajosa.
- Cubre el recipiente con un paño de cocina limpio y déjalo reposar a temperatura ambiente (preferiblemente entre 20-25°C) durante 24 horas.
Paso 2: Día 2
- Después de 24 horas, es posible que notes algunas burbujas en la superficie de la masa. Esto indica que la fermentación ha comenzado.
- Retira la mitad de la masa madre (aproximadamente 100 g) y deséchala o utilízala para hacer otro tipo de pan o repostería si lo deseas.
- Agrega otros 100 g de harina de trigo integral y 100 ml de agua sin cloro a la masa madre restante. Mezcla bien hasta obtener una consistencia homogénea.
- Cubre el recipiente nuevamente con el paño de cocina limpio y deja reposar durante otras 24 horas.
Paso 3: Día 3
- En este punto, la masa madre debería haberse desarrollado aún más. Puedes notar un aroma ácido y un aumento en las burbujas.
- Repite el paso anterior, retirando la mitad de la masa madre y agregando 100 g de harina de trigo integral y 100 ml de agua sin cloro.
- Mezcla bien y cubre el recipiente con el paño de cocina limpio. Deja reposar durante 24 horas más.
Paso 4: Alimentación y mantenimiento de la masa madre
- Después de los primeros tres días, tu masa madre debería estar activa y lista para ser utilizada en la preparación de pan.
- A partir de este punto, para mantenerla activa, deberás alimentarla diariamente. Para ello, repite el paso 3 cada día, retirando la mitad de la masa madre y agregando 100 g de harina de trigo integral y 100 ml de agua sin cloro.
- Si no vas a usar la masa madre durante un tiempo prolongado, puedes almacenarla en el refrigerador y alimentarla una vez a la semana.
Hacer tu propia masa madre casera puede ser una experiencia gratificante en la cocina. Siguiendo esta receta paso a paso y alimentando regularmente tu masa madre, podrás disfrutar de su sabor y beneficios en la preparación de panes y otros productos horneados. Experimenta con diferentes tipos de harina y técnicas de fermentación para obtener resultados aún más deliciosos. ¡Disfruta del maravilloso mundo de la panadería casera con tu propia masa madre!